En este proyecto, Vagli Gold aporta luz y carácter a una cocina de líneas serenas, donde el mobiliario en tonos suaves y la madera dibujan un ambiente cálido y equilibrado. Su blanco limpio y el veteado fino con reflejos dorados introducen un matiz elegante que acompaña el espacio sin imponerse.
La encimera, revestida en Vagli Gold, se convierte en una superficie continua que ordena visualmente la composición y refuerza la sensación de amplitud. Inspirado en el mármol calacatta, el material aporta una presencia reconocible: un fondo puro que contrasta con vetas sutiles y luminosas, capaces de transformar la luz en un recurso más del diseño.
En el frente de trabajo, la continuidad del acabado mantiene una estética limpia y coherente, conectando las distintas zonas de la cocina con una misma lectura. El resultado es un conjunto donde cada elemento encuentra su lugar, creando un entorno pensado para vivirse con calma.
Proyecto: Daniel Raspeño
